CONCLUSIONES FINALES SOBRE LA ASIGNATURA

 

Esta asignatura, verdaderamente, se me ha hecho muy corta y me hubiese gustado que fuese más duradera.

Gracias a la elaboración de este trabajo, me he adentrado y sobretodo he recordado a la niña (que fui un día) a la cual le gustaba leer cuentos; pero sobre todo al volverlos a releer me he sentido agusto y feliz, recordando las sensaciones que me daban.

También me ha dado un poco de melancolía al pensar, cuanto tiempo ha pasado ya, que recuerdos, que libros tan bonitos, como me gustaban…

Me parece tan importante, el papel de la literatura infantil y juvenil, y sobre todo que se transmita en el aula, aunque por desgracia no todos los docentes le dan el “prestigio” que se merece.

Para la elaboración de mi conclusión debo de exponer ¿qué es la literatura infantil?

El concepto de literatura proviene del latín  littera que significa letra. En la antigua Grecia, la literatura era considerada el arte por el arte, como la expresión y la creación de la belleza. Se agrupa en tres grandes géneros: Narrativo, lírico y dramático.

Ahora bien, dentro de la literatura destaca, otra clasificación conocida como literatura infantil, la cual, comenzó a configurarse como categoría lingüística y hecho histórico del siglo XX. Se define como el arte cuya intención fundamental es provocar la emoción estética en el niño, estimulando a su vez, el desarrollo de la imaginación y la capacidad creadora.

Se puede decir, que la literatura infantil es indiscutiblemente una literatura diferente a la que se escribe para adultos, siendo esta dirigida, escrita y diseñada para los niños, lo cual está presente en sus temas, estilos, formas narrativas…

Pienso que es muy importante la literatura infantil y juvenil para el desarrollo y la formación del niño/a, y que ayuda al niño/a a crear, inventar, soñar… y trabajándola desde pequeños ayudaremos a formar a adultos lectores, como el caso de Elisa (nuestra pequeña visitante), lo cual contribuye en todos los aspectos de su aprendizaje, e incluso ayuda al pequeño/a lector/a en el proceso de construcción de su personalidad.

Pero hay un problema,  es que la valoración social e institucional que tiene la literatura infantil y juvenil, no corresponde al nivel de importancia que esta merece.

Me parece imprescindible trabajar la literatura infantil y juvenil en el aula de clase, ya que puede ser un importante apoyo pedagógico y constituye un valioso recurso didáctico en el proceso de enseñanza-aprendizaje.

Para mí la literatura, no es un mero entretenimiento, ni un modo grato de pasar el tiempo, tampoco tiene como fin conocer los nombres de escritores vivos y difuntos, ni que el objetivo es saber que recursos tiene…, sino que es disfrutar de la lectura, y poder dialogar con los compañeros acerca de un libro, ver la opinión persona, sus emociones…

Como dice Don Juan Mata en: La edad de Aquiles o la futilidad de la literatura.prefiero diez discusiones profundas sobre libros, que cien lecciones sobre estilística o movimientos literarios” estoy totalmente de acuerdo, ya que las emociones, ideas, discusiones, debates que esto genera, hace que nos enriquezcamos unos a otros y que observemos de manera totalmente diferente a como veíamos el papel de la literatura.

Y por supuesto también estoy de acuerdo con la frase “Soy más partidario de unos cuantos libros bien leídos en los años decisivos que de la memorización de repertorios de libros que jamás se leerán” porque ¿para qué queremos saber tantas fechas, autores, libros… si tan solo es lo único que vamos a recordar? Lo verdaderamente importante, pienso, son todas aquellas emociones que te puede transmitir el libro, historia… ¿de qué nos sirve aprendernos la fecha de publicación de un libro, el autor… si no estamos cumpliendo la función que caracteriza la literatura?

 Los libros los realizan los escritores con un fin de ser leídos (no de que se aprendan el nombre del libro…) y es el de mostrar sus pensamientos, sus historias e incluso puede que vivencias personales, emociones… Por lo tanto si simplemente nos sabemos el nombre de un determinado libro o la fecha de publicación, creo que no le estamos dando el valor que verdaderamente se merece ese autor y esa obra.

En conclusión, gracias a esta asignatura, me he dado cuenta de que los buenos libros para niños pueden ser disfrutados por todas las edades. Aunque por desgracia hay adultos que apenas se inician en la lectura de libros para niños.

Hay muchos interrogantes a los que debemos hacer frente los futuros docentes para poder acercar a los niños a la lectura, pero como futura docente, y gracias a este trabajo que me ha hecho “abrir los ojos”, y ver otra perspectiva acerca de la Literatura, espero poder llegar a responder estos interrogantes y poder acercar a los niños al maravilloso mundo de la literatura.